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Documento Metodológico: Bosques – CUBHIC 2.0

By Boris F. Ochoa-Tocachi, José Cuadros-Adriazola, Vivien Bonnesoeur
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La protección de bosques hace referencia a la práctica de evitar la degradación o la deforestación de los bosques y, así, conservar los servicios ecosistémicos hídricos brindados por los bosques. La restauración forestal, por otro lado, incluye intervenciones como la forestación, la silvopastura y la agroforestería. Se define como forestación al establecimiento de cobertura forestal mediante la regeneración natural o en forma de plantaciones en zonas que en el pasado tuvieron (o no) bosques. La restauración forestal creará una serie de impactos en toda el área que se extiende hasta el nivel de cuenca. Para que esta intervención logre beneficios generales de calidad y cantidad de agua, dependerá, en gran medida, de cómo los diseños de restauración forestal respondan a factores hidrológicos y físicos que influyen en la escorrentía y, a su vez, en la erosión del suelo. La cuantificación de beneficios de la protección de bosques y la restauración forestal requiere contabilizar las interacciones entre evapotranspiración, percolación, contenido de humedad y pérdida de suelo. Se espera que la restauración forestal dé lugar tanto a un incremento en la evapotranspiración en el área reforestada como a una reducción en la escorrentía superficial de agua. Se espera que una menor escorrentía reduzca la pérdida de suelo, beneficiando con ello la calidad física del agua, aguas abajo, a través de la reducción de pérdida de suelo y aportes de nutrientes a los cuerpos de agua. Sin embargo, el aumento en evapotranspiración producirá una disminución en el rendimiento hídrico total de la cuenca y, posiblemente, también en el caudal base.

Video instructivo:

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